Diseño de interiores: Natalia Tokmacheva, Margo Kashina
soluciones de diseño
Como parte del desarrollo general del complejo hotelero Art Village Armenia, la "Villa en el Jardín" es una de varias residencias independientes diseñadas por nuestro equipo. Además de estas villas, el resort contará con dos edificios hoteleros y una serie de casas a lo largo de la orilla del lago, todo ello enmarcado por la belleza natural de los huertos de manzanos y los campos abiertos.
CONCEPTo
La "Villa en el Jardín" fue concebida como una residencia de dos plantas con una superficie de aproximadamente 270 metros cuadrados. La distribución se planificó cuidadosamente para ofrecer el máximo confort y conexión con el paisaje circundante. En la planta baja, la villa alberga un amplio salón con techo a doble altura, cocina, comedor y dos dormitorios. La segunda planta ofrece dos dormitorios adicionales y una suite generosa. Una característica clave de la villa es su gran terraza, diseñada como una extensión de las zonas comunes, e incluye una cocina exterior y un comedor al aire libre. El concepto arquitectónico de la villa abraza las cualidades naturales del entorno manteniendo un diálogo coherente con el resto del complejo. Las fachadas combinan enfoques tradicionales y modernos, utilizando piedra armenia de origen local junto con metal oscuro texturizado. Un motivo de diseño destacado es el efecto “a rayas” que se repite en todo el proyecto: se expresa tanto en el tratamiento de las superficies sólidas como mediante listones de madera. Estos elementos permiten el paso de luz natural filtrada durante el día y generan un resplandor cálido y ambiental por la noche.
FAChadaS
Se prestó especial atención a las fachadas para garantizar una integración fluida con el paisaje. Las ventanas de los baños están cuidadosamente protegidas con lamas de madera, ofreciendo privacidad sin renunciar a la luz natural. El tejado a dos aguas de la villa y los amplios ventanales abren los interiores hacia los jardines y las vistas del huerto, mientras que los listones de madera sobre las grandes aberturas no solo protegen el interior, sino que también proyectan patrones de sombra dinámicos en el interior. Al caer la noche, estos elementos permiten que la luz interior se filtre sutilmente, creando un delicado juego de luces y sombras sobre las superficies exteriores. Este equilibrio entre materiales, luz y forma hace que la villa se perciba a la vez refinada y profundamente conectada con su entorno natural.